SÍNTOMAS DE CRISIS
Cuando siente que hasta el agua se ahoga, recuerda que las llaves que le dejó son ahora una veleta en el vendaval, justo cuando comienza a subir la marea. Y si se pintó los labios antes de irse fue porque comprendió que había estado comiendo besos que huían del corazón como un campo de exterminio, y que todo lo que vivió lo había guardado en una hoguera.
Ayer me dijo que gastó todas sus monedas en propinas por aparcar, y que todas esas noches arrugando sus sábanas son ahora como los pañuelos que no compra en los semáforos. Cuenta que la otra noche, justo al pedir la primera Manzanilla, se dio cuenta de que iba a beberse Sanlúcar entera, y acostarse con el primer hombre que le encendiese el cigarro con la mano izquierda. Tuvo que comprar otro paquete.
escuchando: Gazpacho - Desert